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¿QUE ES LA EXPLORACION Y LA CARRERA ESPACIAL? |
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La exploración espacial designa los sacrificios de la humanidad por estudiar el espacio y sus astros desde una base científica y de su posible explotación económica. Estos sacrificios pueden implicar tanto humanos viajando en naves estelares como satélites con aplicaciones telemétricas o bien sondas teleguiadas mandadas a otros planetas (orbitando o bien aterrizando en la superficie de estos cuerpos celestes). La ciencia que investiga los trayectos espaciales y la tecnología relacionada con ellos se llama astronáutica. Las personas que conducen naves espaciales, o bien los especialistas que las pilotan, se denominan astronautas (en Rusia: cosmonautas; en China: taikonautas). Desde un punto de vista estricto, se identifica como astronauta a todo aquel que realiza un viaje suborbital (sin entrar en órbita) o bien orbital a por lo menos cien km de altitud (considerado el límite externo de la atmósfera) El cielo siempre y en todo momento ha atraído la atención y los sueños del humano. Ya en mil seiscientos treinta y cuatro se publicó la que se supone la primera obra de ciencia ficción, Somnium, de Johannes Kepler, que relata un hipotético viaje a la Luna. Después, en mil ochocientos sesenta y cinco, en una conocida obra de ficción titulada "De la Tierra a la Luna", Julio Verne escribe sobre un conjunto de hombres que viajó hasta la Luna utilizando un enorme cañón. En Francia, Georges Méliès, entre los vanguardistas del cine, tomaba la novela de Verne para crear "Le voyage dans la Lune" (mil novecientos dos), entre las primeras películas de ciencia ficción en la que describía un increíble viaje a la Luna. En obras como "La guerra de los mundos" (mil ochocientos noventa y ocho) y "The First Men in The Moon" (mil novecientos uno), H.G.Wells concibió ideas de exploración del espacio y de contacto con civilizaciones extraterrestres. Todavía faltaba mucho a fin de que el humano pudiese lograr conquistar el espacio exterior, mas este sueño se hizo realidad, en parte, mediante las ideas de estos soñadores y del trabajo de vanguardistas. (autoayuda para astronautas) Entre estos vanguardistas se debe rememorar a los ingenieros aeronáuticos P. Paulet (Perú), Robert Hutchings Goddard (EE. UU.), Konstantin Tsiolkovsky (Rusia), Hermann Oberth (Alemania), y más últimamente Wernher von Braun (Alemania) y Serguéi Koroliov (URSS). La tecnología precisa para la exploración espacial estuvo libre con la construcción de los primeros cohetes. Ya que permiten poner en órbita satélites artificiales para estudio tanto de la Tierra como del espacio exterior. Asimismo permiten el envío de astronautas al espacio exterior. Desde el momento en que losviejos chinos idearon la pólvora, se hacen ensayos con cohetes, mas fueron P. Paulet (Perú), Robert Hutchings Goddard (EE.UU.), Konstantin Tsiolkovsky (Rusia) y Hermann Oberth (Alemania) los vanguardistas en la concepción de cohetes. Estos científicos hicieron que la ciencia astronáutica diera sus primeros pasos. P. Paulet diseñó y edificó el primer motor cohete en mil ochocientos noventa y siete. El motor pesaba dos,5 kilos, tenía un empuje de doscientos libras, experimentaba trescientos explotes por minuto y estaba impulsado por comburente de propelente líquido; un componente formado por peróxido de ázoe y gasolina. En mil novecientos dos, Konstantin Tsiolkovsky diseñó una nave a retropropulsión para viajes interplanetarios guiándose en los diseños y el prototipo llamado Autobólido que en mil ochocientos noventa y cinco había desarrollado P. Paulet Mostajo. Además en mil novecientos doce, el maestro estadounidense Robert Goddard y el científico alemán Hermann Julius Oberth (en mil novecientos veintitres) mejoraron sus motores experimentales basándose en la concepción inicial de Paulet. Goddard fue más lejos y edificó distintos cohetes pequeños. Se especializó en concebir y edificar cohetes impulsados por comburente líquido. Múltiples de sus proyectos presentaban conceptos que hasta el día de hoy son utilizados en los modernos cohetes, como por servirnos de un ejemplo la estabilización del vuelo con el empleo de giroscopios. De forma independiente, en la Alemania nacionalsocialista, los ingenieros alemanes desarrollaban un proyecto que resultaría en el misil V-dos (técnicamente más bien descrita como misil). Las V-dos estaban impulsadas por alcohol (una mezcla del setenta y cinco por ciento de alcohol etílico y un veinticinco por ciento de agua) y oxígeno líquido. Los motores producían un máximo de setenta y dos quinientos setenta y cuatro kgf (ciento sesenta cero lbf) de empuje, desarrollando una velocidad de mil trescientos cuarenta y uno m/s, con un radio de alcance de trescientos veintiuno a trescientos sesenta y dos km. Fueron utilizadas para bombardear París y Londres en mil novecientos cuarenta y cuatro. Los proyectos de los nuevos prototipos de cohetes se fundamentan en todos los experimentos anteriores. El principio de funcionamiento del motor del cohete se fundamenta en la tercera ley de Newton, la ley de la acción y reacción, que afirma que "a toda acción le toca una reacción, con exactamente la misma intensidad, misma dirección y sentido contrarios". De esta forma, el cohete se desplazará cara arriba en reacción a la presión ejercida por los gases activos en la cámara de ignición del motor. De ahí que esta clase de motor lleva por nombre de propulsión a reacción. En la década de mil novecientos treinta, el entusiasmo con los cohetes era muy grande tanto en los EE.UU., con Goddard, como en la URSS. Con la derrota de Alemania en la S. Guerra Mundial, los EE.UU. y la URSS atraparon la mayor parte de los ingenieros que trabajaron en el desarrollo de la V-dos (Operación Paperclip). Particularmente esencial para los EE.UU. fue el reclutamiento deWernher von Braun, entre los primordiales proyectistas alemanes, oficial y también ingeniero de la SS, que participó activamente en el programa de misiles balísticos de los EE.UU. y tras los primeros pasos del programa espacial estadounidense (habiendo sido, aun, el líder del equipo que proyectó el lanzador Saturno V que llevó las naves Apolo a la Luna). Históricamente, la exploración espacial empezó con el lanzamiento del satélite artificial Sputnik por la URSS el cuatro de octubre de mil novecientos cincuenta y siete, en el Cosmódromo de Baikonur (base de lanzamiento de cohetes de la URSS), en Tyuratam, en Kazajistán. Este evento provocó una carrera espacial por la conquista del espacio entre la URSS y los U.S.A. que acabó con la llegada del hombre a la Luna. El primer ser vivo en el espacio no fue un hombre, sino más bien la perra rusa Laika. Llegó al espacio en mil novecientos cincuenta y siete a bordo de la nave espacial Sputnik II, y murió 4 días después, debido al calor en la reentrada. Diferentes animales fueron utilizados en los principios de la exploración espacial para probar el efecto de la radiación, de la ausencia de gravedad y de las condiciones del espacio exterior sobre los organismos vivos. Ya antes de la perra Laika, fueron las perras Albina y Tsyganka, utilizadas por la URSS en vuelos sub-orbitales. Por el lado de los E.U., los primeros primates fueron Albert 1 y Albert dos, que murieron en mil novecientos cuarenta y nueve en la punta de cohetes V-dos capturados en Alemania. Sputnik V, la última misión Sputnik, fue lanzada al espacio el diecinueve de agosto de mil novecientos sesenta con los perros Belka y Strelka, cuarenta hámsters, 2 ratones y diferentes plantas. Las misiones Korabl-Sputnik llevaron los perros Pchelka, Mushka, Chernuschka y Zviózdochka. El soviético Yuri Gagarin (mil novecientos treinta y cuatro - mil novecientos sesenta y ocho) fue el primer humano en el espacio, en un vuelo orbital de cuarenta y ocho minutos, a bordo de la nave Vostok 1. El vuelo de Gagarin se efectuó el doce de abril de mil novecientos sesenta y uno. En este vuelo afirmó la conocida frase: "La Tierra es azul". La primera mujer en el espacio, fue la asimismo soviética V. Tereshkova (mil novecientos treinta y siete - ), que el dieciseis de junio de mil novecientos sesenta y tres dio cuarenta y seis vueltas cerca de la Tierra a bordo de la nave Vostok VI. El lanzamiento de la Sputnik y el envío del primer hombre al espacio se deben, en buena medida, al ingenio del ingeniero soviético Serguéi Koroliov, el ingeniero-jefe del programa espacial soviético, que logró persuadir a Nikita Jrushchov, líder de la URSS por aquel entonces, a invertir en el programa espacial. Fue quien tuvo la idea de llevar (verdaderamente) personas a la Luna. 4 meses tras el lanzamiento de la Sputnik I, los EE.UU. respondieron con su primer satélite, el Explorer I, el treinta y uno de enero de mil novecientos cincuenta y ocho. El número de satélites artificiales terrestres y sondas espaciales lanzados por los EE.UU. y por la URSS se multiplicaron en los primeros años de la carrera espacial. A los Sputniks de la URSS les prosiguieron, aparte del Explorer I, las Vanguard I, II y III de los EE.UU., y un sin número de satélites de comunicación, meteorológicos y espías. Cerca de la mitad de la década de mil novecientos sesenta los dos, EE.UU. y URSS, habían lanzado tantos satélites que sería imposible apuntarlos todos en un artículo generalista como éste. Aparte de las Sputniks, los soviéticos habían lanzado doce satélites de la serie Universo, y los EE.UU. habían lanzado dieciseis satélites Explorers y más de treinta y ocho satélites de reconocimiento Discoverer, solo por refererir ciertos. Los logros iniciales de la URSS en la carrera espacial, que incluyen el primer satélite artificial - el Sputnik - y el primer hombre en el espacio - Yuri Gagarin, retaron a los EE.UU., cuyo programa espacial todavía daba los primeros pasos - el primer estadounidense iría al espacio solo el cinco de mayo de mil novecientos sesenta y uno, incluso de este modo solo en un vuelo sub-orbital. En un conocido alegato en mil novecientos sesenta y uno, John F. Kennedy lanzó el reto de "mandar hombres a la Luna y traerlos a salvo" antes que la década terminara. En su renombrado alegato en la Universidad Rice sus palabras fueron: We choose to go to the moon. We choose to go to the moon in this decade and do the other things, not because they are easy, but because they are hard ("Nosotros decidimos ir a la Luna. Decidimos ir a la Luna en esta década y hacer otras cosas, no por el hecho de que sean simples, sino más bien por el hecho de que son bien difíciles"). Desde entonces, los EE.UU. pusieron en marcha un ambicioso programa espacial tripulado que se comenzó con el Proyecto Mercury, que utilizaba una cápsula con capacidad para un astronauta en maniobras en órbita terrestre, seguido por el Proyecto Geminicon capacidad para 2 astronautas, y por último el Proyecto Apolo, cuya nave tenía capacidad para 3 astronautas y aterrizar en la Luna. Los primeros astronautas en circunnavegar la Luna fueron los tripulantes de la Apolo ocho, Frank Borman, James A. Lovell, Jr. y William A. Anders, en la noche de Navidad de mil novecientos sesenta y ocho. Por inconvenientes en sus misiones Zond (que empleaban la nave Soyuz cambiada para la circunnavegación de la Luna), los soviéticos no fueron capaces de llevar hombres a la órbita de la Luna ya antes de los EE.UU., y jamás más lo harían. Solo las misiones Zond no tripuladas, Zond cinco y Zond seis, lo hicieron en el mes de septiembre y noviembre de mil novecientos sesenta y ocho. Tras esto, todavía hubo las misiones no tripuladas Zond siete y Zond ocho que circunnavegaron la Luna en mil novecientos sesenta y nueve y mil novecientos setenta, ya tras los triunfantes vuelos tripulados de los EE.UU. cara a la Luna. Por último, el propósito de llegar a la Luna fue alcanzado el veinte de julio de mil novecientos sesenta y nueve por la Apolo once, después de despegar el dieciseis de julio y regresando a la tierra el veinticuatro de julio. Es conocida la oración del primer astronauta en pisar en la Luna, Neil Armstrong: "Un pequeño paso para el hombre, mas un enorme salto para la humanidad". En mil novecientos setenta y cinco, las naves Apolo y la soviética Soyuz diecinueve efectuaron un acoplamiento en el espacio, en la primera misión conjunta de la NASA (agencia espacial de los EE.UU.) y de la Agencia Espacial soviética. Después, con la caída del comunismo, esta colaboración entre los 2 países se acentuaría y terminarían participando juntos en la construcción de la Estación Espacial Internacional.
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